Buscar casas en Miyajima

La anfitriona fue muy amable. El onsen estaba muy bien, pero hay que advertir que las habitaciones están arriba y para ir al aseo hay que bajar una escalera un poco angosta. Para ir a la cocina si estás en la habitación : tienes que bajar la escalera estrecha y volver a subir por otra escalera estrecha... es incómodo. De todos modos, lo pasamos bién. La isla es digna de visitar , es fundamental quedarse una noche para gozar de la tranquilidad. La casa estaba impoluta. Nos dejaron el desayuno y nos ayudaron mucho con los horarios.

La casa es muy bonita con las habitaciones tradicionales. El personal y el gato Miku muy bien, te sientes como en casa y zonas comunes con todo lo necesario. Tiene un pequeño Onsen privado que vale la pena probar.

Casa tradicional japonesa para nosotros solos, pudimos vivir por una noche alejados de hoteles y disfrutar del silencio y el ambiente de Miyajima. El personal es encantador y te hacen un tour por toda la casa resolviendo dudas y te enseñan los mejores sitios para visitar. También te dicen las mejores horas para ver el Torii dependiendo de la marea

Fue el mejor alojamiento de toda nuestras vacaciones en Japón. La señora que lo regenta es muy amable y simpática. La casa es preciosa, pudimos disfrutar del onsen privado y de una cena y desayuno de 10. Si vuelvo no dudaré en alojarme aquí de nuevo y desde luego que lo recomendaré siempre.

Por suerte, es una casa (y creo que estábamos solos). Tiene salón y cocina, pero tienes que subir las escaleras para acceder a algunas habitaciones. Todo estaba muy limpio. Te hacen quitar los zapatos en la entrada. Hay un baño con bañera tipo tradicional, con un retrete separado; y otro retrete en el piso de abajo. Incluyen toalla grande y de mano, cepillo de dientes y pack de jabones.

Lo describiría como un hostal 5 estrellas? De verdad todo muy lindo. Una gran casa japonesa. Con un lindo jardín. Con onsen. Los cubículos compratidos espaciosos. El personal bilingüe y amable. Muy recomendado.

Me encantó la casa, el trato recibido y los servicios. A destacar la amabilidad del personal, el último día ya que íbamos muy cargados les pedí ayuda para solicitar un taxi. Llamó y como le dijeron que iban a tardar mucho, cogió su coche y nos acercó al ferry.

La casa, el onsen privado, las comidas que te dan.

Todo. Desde el primer momento, Kikuchi-san nos hizo sentir como en nuestra propia casa. Nos explicó las normas y nos enseñó la casa. El alojamiento es enorme y tiene todo lo necesario y más para tener una estancia maravillosa en Miyajima. Muy cerca del muelle donde atraca el barco. También muy cerca de un Lawson. El baño es una auténtica gozada y el patio, increíble. Una de las mejores experiencias de nuestro viaje. Volveremos!

La habitación era enorme en una casa típica antigua japonesa, tomamos un baño privado, y todo estaba preparado para la noche. La cena es increíble, no dejen de aprovechar para cenar allí.